lunes, 3 de agosto de 2009

Tiempo

Supongo que lo bueno de tener tanto tiempo libre es que puedo dedicarme a la escritura en cualquier momento. Por alguna extraña razón cuando nuestra vida no está marcada por un horario debido al trabajo o lo que sea, el cuerpo no siente la misma necesidad de descansar. Y así me encuentro, otra noche en vela.

Hoy estuve en el cine viendo una comedia argentina con la que pasé muy buen rato, los argentinos tienen un don para el humor y el sarcasmo. La película es Un novio para mi mujer, y la recomiendo.
El personaje femenino principal es la Tana Ferro, curiosa mujer. No quiero desvelar nada de la película, por lo que me guardaré unos comentarios que iba a plasmar. sólo diré que un día un amigo me habló de la película y me dijo que yo le recordaba a la Tana, y ya pude cerciorarme de que no encuentro mucho parecido. Supongo que pasé por una etapa en la que no estaba muy de acuerdo con lo que tenía alrededor, o que me resultaba fácil hablar con esa persona y por eso veía todos mis tormentos.. quién sabe.

Y bueno, como dicen que el ser humano necesita dormir, dejaré una poesía y me iré a dormir al fin :)

Hoy mirando la luna
pude dibujar tu rostro,
tan sereno, tal lindura
que mi sonrisa surgió de pronto.

Caminatas en la noche
conociendo otra ciudad,
otra cara de ese rostro
que me intriga más y más.

Las luces te bañan,
pareces de cristal
tantos ojos en la noche
brillando en la oscuridad.

Silenciosa en la penumbra
te vas dejando guiar,
las estrellas te hacen guiños
y tu empiezas a soñar.

Con las manos que algún día
volverán a dibujar
el contorno de tu rostro,
tus labios, cada lunar.

Y recuerdos van y vienen,
los sueños afloran ya
ilusiones de un tiempo ausente
pero no miras atrás.

En la noche te redescubres,
la energía vuelve a emanar
para renacer al día siguiente
con la ilusión de un día más.

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